Encontraron a su mamá luego de casi 30 años

Leidy Otazú (28) y Luis Martínez (29) son dos hermanos que fueron criados por su abuela materna. Su madre, Brígida Candia Mereles (47), los dejó a su cargo por no sentirse capaz de criarlos, ya que es sordomuda. El tiempo pasó y la abuela falleció, por lo que los hermanos fueron adoptados por familias diferentes.

Luis Martínez (izq), Brígida Candia (centro abajo), Leidy Otazú (der), junto a Teresa Muller (centro arriba), del Registro Civil de Ciudad del Este
Luis Martínez (izq), Brígida Candia (centro abajo), Leidy Otazú (der), junto a Teresa Muller (centro arriba), del Registro Civil de Ciudad del Este

Hace más de un año, Leidy, quien trabaja como empleada doméstica, emprendió con ayuda de su hermano la búsqueda de su madre: cada fin de semana, al salir del trabajo, viajaba de Ciudad del Este hasta Caaguazú a buscar a la mujer, puesto que tenía información de que su progenitora se encontraba en Campo 9.

La joven llevaba consigo la esperanza de ver a su mamá de nuevo, por lo que iba tocando las puertas de cada casa para poder ubicarla. El tiempo pasó y los hermanos no daban con ella. La joven, ya desesperanzada, se percató de que una mujer mendigaba por las calles de Campo 9.

Una mirada entre las dos bastó para que la conexión entre madre e hija renazca, sin necesidad de hablar: el poder de la sangre las unió, Leidy había encontrado a su mamá. Fue tanta la emoción, que los hermanos sacaron a ña Brígida de la calle y la llevaron con ellos a Ciudad del Este.

Allí conocieron a Teresa Muller (50), encargada del Registro Civil. “Ellos llegaron con su mamá el lunes y me pidieron que les ayude a registrarla, ya que no contaba con identidad. Hoy irán al Departamento de Identificaciones para gestionar la cédula y llevar el apellido de su mamá”, indicó Muller.

Actualmente, la familia está unida y vive feliz  en el barrio 23 de Octubre de la ciudad altoparanaense. Ña Brígida dejó las calles para siempre.

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