Solamente apelando al lenguaje futbolístico puede tratar de entenderse la metida de pata que hizo Mauricio Macri, al haber optado por Horacio Rodríguez Larreta como
Solamente apelando al lenguaje futbolístico puede tratar de entenderse la metida de pata que hizo Mauricio Macri, al haber optado por Horacio Rodríguez Larreta como