Desde hace décadas, la inmigración que recibe la Argentina es mayoritariamente latinoamericana. Esa cercanía impulsa mayor aceptación hacia los que llegan, pero no siempre mayor
Desde hace décadas, la inmigración que recibe la Argentina es mayoritariamente latinoamericana. Esa cercanía impulsa mayor aceptación hacia los que llegan, pero no siempre mayor