En nuestro continente, con muy pocas excepciones, los partidos tradicionales quedaron atrapados en un profundo y acelerado proceso de mediocridad y corrupción. Así, gradualmente dejaron
En nuestro continente, con muy pocas excepciones, los partidos tradicionales quedaron atrapados en un profundo y acelerado proceso de mediocridad y corrupción. Así, gradualmente dejaron