Tres jovencitas fueron vendidas a brasileña

La Fiscalía ordenó la captura del vendedor y simultáneamente inició un proceso contra la proxeneta (*) brasileña que pagó por tres jóvenes paraguayas por trata de personas. Tampoco descarta solicitar su extradición.

La fiscala Analía Rodríguez manifestó a radio Monumental que, por el momento, hay una orden de captura contra Leonardo Sanabria, quien fue el que aparentemente vendió a las tres jóvenes a una mujer brasileña, dueña de un burdel en Santa Elena, Brasil, a unos 150 kilómetros de Presidente Franco, Alto Paraná.

El caso ocurrió hace un mes, aproximadamente. Las víctimas ya están sanas y salvas con sus respectivas familias. Aunque fueron amenazadas desde la clandestinidad, aparentemente, por Sanabria. El hombre actualmente se encuentra prófugo.

Igualmente, la representante del Ministerio Público adelantó que, de acuerdo a los datos que provea Sanabria cuando sea detenido, podría iniciar un proceso contra la brasileña que pagó por las paraguayas.

Rodríguez señaló que puede pedir su extradición por trata de personas.

De acuerdo al testimonio de las víctimas, la dueña del burdel trató de impedir que las mujeres puedan volver al Paraguay. Supuestamente, les requirió que le devuelvan el dinero invertido por ellas.

Las víctimas fueron contactadas a través de una amiga en común de Leonardo, quien les propuso si querían probar el trabajo en el cabaret. Aunque accedieron voluntariamente, al llegar al lugar se percataron de que Leo las vendió a 450 reales cada una a la propietaria del prostíbulo.

Las afectadas reconocieron que accedieron por curiosidad; sin embargo, cuando llegaron al sitio se arrepintieron e intentaron volver al Paraguay, pero ya no pudieron, porque fueron amenazadas por la dueña del lugar.

La fiscala sostuvo que las víctimas contactaron por las redes sociales con una amiga y esta fue quien dio aviso a los familiares para la denuncia que fue hecha ante la Secretaría de la Mujer en Ciudad del Este, de donde el caso fue derivado al Ministerio Público y, a través del Consulado Paraguayo en Foz de Yguazú, se denunció el hecho ante la Policía Civil del Brasil.

(*) Persona que obliga a otra a ejercer la prostitución y se beneficia de las ganancias económicas que se obtienen de esta actividad

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