Paraguay está reforzando los controles sanitarios a los viajeros en los puntos de entrada al país para evitar la introducción de enfermedades infectocontagiosas no prevenibles con vacunas, como el dengue o el chikunguña.

La directora general de Vigilancia de la Salud, Águeda Cabello explicó que el personal sanitario está revisando los certificados médicos y de vacunación, así como los antecedentes del cuadro clínico de todas las personas que ingresan al territorio paraguayo.
Además, lleva a cabo un seguimiento de los extranjeros para poder actuar de inmediato si alguno de los viajeros manifiesta «síntomas alarmantes» durante su estadía en el país.

Como parte de esta estrategia, el Ministerio de Salud Pública (MSP) prevé instalar nuevos consultorios de atención sanitaria a viajeros en puntos fronterizos, como Asunción o Ciudad del Este.

En estos centros se realizarán evaluaciones clínicas durante los primeros 15 días de estancia de los extranjeros en Paraguay, para controlar la posible aparición de enfermedades como el sarampión, la rubéola, la poliomielitis o la tuberculosis.

También se aumentará la vigilancia para impedir la propagación de enfermedades transmisibles que no cuentan con vacunas, como el dengue, el ébola, el chikunguña o la malaria.

Paraguay inició esta semana una campaña de prevención para que sus zonas turísticas, como Encarnación o las ruinas jesuitas, estén libres de criaderos del mosquito Aedes aegypti, vector de enfermedades como el dengue o el chikunguña.

También promoverá «espacios libres de criaderos» en centros comerciales del Gran Asunción para impedir la reproducción del insecto.

Las muertes por dengue en Paraguay en 2014 fueron cinco, una reducción del 93 % respecto al año anterior, cuando la epidemia se cobró 252 vidas y se registraron 150.000 casos, según fuentes oficiales.

En 2014 se detectaron en Paraguay ocho casos de chikunguña, y solo uno de ellos fue registrado como autóctono.

Paraguay.com/EFE