El Domingo de Ramos es una celebración religiosa en la que la mayoría de las confesiones del cristianismo conmemora la entrada de Jesucristo a Jerusalén, dando inicio a la Semana Santa, que finaliza el Domingo de Pascua o día de la Resurrección de Cristo. 

Es el momento de la Semana Santa donde se proclama a Jesús como el hijo de Dios y nuestro salvador, es una forma de aceptar su obra santa en la humanidad y es, además, la renovación de la fe en Dios. 

Las ceremonias principales de este día son la misa, la bendición de las palmas y la procesión, Los fieles que participan en la procesión, que data del siglo IV en Jerusalén, deben llevar en las manos ramos de palma, olivos u otros árboles, y entonar cantos. Las palmas se utilizan para simbolizar la entrada de Jesús a Jerusalén, 

De manera tradicional, en todo el Paraguay ese domingo, la gente acude a las iglesias a evocar aquel momento llevando los ramos hechos con hojas de una variedad de palmera muy común en el Paraguay: el “Pindó”, que en nuestro país está asociado al origen del mundo de los guaraníes porque decían que esta planta se usó como pilar del mundo que también, en la creencia popular, posee poderes curativos y protectores.

Por esta razón, muchos creyentes ponen las palmas bendecidas por el sacerdote en sus hogares como señal de protección para la familia.