Comunicado del Partido de los Trabajadores del Paraguay
No a la reelección fraudulenta de Lugo y Cartes
El horno que cocina arreglos de dudosa constitucionalidad entre Cartes y Lugo está a punto. En ese infierno está en marcha un manjar para la mesa de los “barones del usen y abusen” y un apetecible plato para la mesa de los Lugo, Sixto, Richer y otros, pero para el pueblo trabajador, en contrapartida, es una nauseabunda y podrida comida.
Torcer todo con medidas de dudosa legalidad y acomodar la Constitución Nacional vía la enmienda para habilitar la reelección, solo es favorable a Cartes, Lugo, Llano y a sus lugartenientes chupamedias y serviles. Para el pueblo trabajador, sus intereses y derechos, muestra un panorama de tenebroso presente y trágico futuro.
Lugo y Cartes ya probaron que no sirven
Ambos, Cartes y Lugo, ya fueron probados y demostraron categóricamente que no sirven para encaminar y asegurar mejores días para las grandes mayorías de nuestro pueblo. El rekutu solo será más de lo mismo: bienestar para las minorías y agudos malestares para las grandes mayorías.
Y afirmamos esto sin dar, ni por un segundo, mérito ni confianza alguna a los Mario Abdo Benítez, Efraín Alegre o Mario Ferreiro que son, en el fondo y en la superficie, hermanos de clase de los anteriores.
De Cartes y sus lugartenientes se puede entender la ansiedad por seguir, porque están apropiándose de todo lo que existe de valor en el país: patrimonio, bienes, servicios, lo que venga, ganando dinero a manos llenas.
De los “barones del usen y abusen”, es entendible que hagan firmar muertos y falsifiquen firmas a diestra y siniestra para intentar darle “calor popular” a su maniobra de imponer medidas lesivas a la misma Constitución Nacional, aun siendo esta una Constitución burguesa de democracia formal. De estas yuntas de devoradores insaciables, tan comunes en el coloradismo, es normal esperar que utilicen como papel higiénico la Constitución Nacional en pos de su enfermiza búsqueda del rekutu para el patrón Cartes.
Pero de Lugo y del luguismo se podía haber esperado algo distinto. Sin embargo, son el mismo presente griego con maquillaje diferente, aun cuando traten de vender una imagen distinta y de presentarse ante el pueblo como “el cambio” para mejor.
Siguen el rumbo de la traición y la felonía
Hay que decir, con todas las letras, que la responsabilidad histórica está en manos de Lugo y del Frente Guasu, que, hasta ahora, siguen el rumbo de la traición y la felonía.
En efecto, una de las mayores ruindades políticas en este último periodo es la actitud hipócrita, servil y complaciente de Lugo y sus acólitos, los senadores Richer, Sixto y Carrillo, con Cartes y el cartismo.
Lugo, con su hipocresía sin límites y tratando de guardar las apariencias, simula que está en contra de la enmienda mientras fomenta (acá y en el más allá) su concreción, ultimando, con sus incondicionales y sus verdugos, su tan ansiada como inútil candidatura.
Y los Richer y Cía., desviviéndose para habilitar a Cartes de manera que Lugo, a su vez, pueda presentarse y, por esta vía, seguir ellos existiendo en su tarea política y parlamentaria de la que mientras ellos sacan ventajas, es inofensiva para los grandes propietarios y ricos de nuestro país y perjudicial para el pueblo trabajador.
Lugo, el enterrador de sueños
Lugo, el enterrador de sueños y el corrosivo número 1 de las dirigencias campesinas y populares, es el más dañino de todos, porque mientras su política y programa adormecen y desarman a las fuerzas populares para entregarlas en el altar de la burguesía, a él sólo le desvive su prestigio, el que utiliza como maquillaje para tapar la podredumbre. Con sus interminables cantinfleos sobre los «días mejores para todos y todas» sirve hasta para chistes, pero es tan profundamente dañino que, como ideología y para el bien de la clase trabajadora, debe ser erradicado de las mentes y corazones populares.
Es necesario y urgente que las fuerzas populares y de izquierda se manifiesten por todos los medios contra estas maniobras fraudulentas de los reeleccionistas. Duro contra Cartes y Lugo. Sin dar ninguna confianza a los Marito, Efraín o Ferreiro, hay que salir a manifestarse en contra la acomodación de reglas democráticas burguesas a los antojos privados de conocidos anti pueblo trabajador.
El Frente Guasú debe dejar de abonar el terreno a las marabuntas del país. El movimiento de masas debe impedir por todos los medios y con todas sus fuerzas que se abra esta verdadera caja de pandora antidemocrática. ¡NO! rotundo a la reelección de Cartes y de Lugo.
Es también urgente que en el plano electoral, los trabajadores discutamos un proyecto que responda a los intereses del pueblo. Un gran frente electoral clasista, amplio y democrático que se presente como alternativa electoral, con candidaturas de la clase trabajadora, campesina y popular, con un programa que se oponga por el vértice a todas las variables neoliberales y entreguistas y ponga en perspectiva una sociedad socialista sin explotadores ni explotados.
Comité Ejecutivo Nacional
Partido de los Trabajadores