Según el responsable de la Organización Internacional para las Migraciones en Paraguay (OIM), Richard Velázquez, la cantidad de inmigrantes que recibió históricamente el Paraguay ronda las 170 mil personas, de estas, al menos cerca de 3.500 se asentaron en el país en los últimos dos años.

En la cifra se debe tener en cuenta que un alto porcentaje corresponde a personas que ingresaron en carácter de turistas y que con el tiempo decidieron establecerse de forma permanente, explicó Velázquez en entrevista en los estudios de la 90.1 FM, Radio Viva, de Asunción, Paraguay.

En contrapartida, y, pese a que se especuló que con la crisis financiera una gran cantidad de paraguayos/as volvería al país tal cosa no sucedió. Al contrario, la cantidad de compatriotas que salen del Paraguay con intensión de radicarse en el exterior se mantuvo al mismo ritmo pero volcó en los últimos años principalmente hacia la Argentina, donde el cambio del guaraní con el peso, es relativamente más bajo, es más fácil emprender viaje.

En el país vecino se mantiene la histórica tendencia de trabajos desarrollados por paraguayos en todo lo que hace a la construcción, servicios básicos como operarios y de tareas doméstico en el caso de las mujeres. Un porcentaje interesante, cabe mencionar, es el de estudiantes que van a realizar cursos de especialización.

Hay que tener en cuenta que en este último caso, una vez que terminan sus cursos de capacitación solo vuelven aquellos que no pudieron conseguir una oferta laboral. Esto se da porque durante el tiempo de residencia la persona fue creando un lazo de relaciones además de la esperanza de conseguir un puesto que le reditúe en ganancias económicas más favorables a las que se conseguirían acá. “Una persona que llega la país, si bien puede tener una buena formación académica, pero es casi seguro que al inicio de sus actividades laborales empiecen de cero”, remarcó Velázquez.

DESEO DE RETORNO

La experiencia a lo largo de los años demuestra que el paraguayo/a que esta residiendo en el extranjero en su mayoría, tiene intención de volver. “Pueden pasar 30 a 40 años de residencia de una persona en el extranjero pero el deseo de volver no cambia. Ahora las condiciones para volver no son siempre iguales para todos, sobretodo por el choque psicológico que implica al momento de regreso en los primeros tiempos que hace que la persona tenga como primera opción, el deseo de volver a viajar si las situaciones y condiciones no son favorables”, manifestó

 SERVICIO DE LA OIM

La OIM trabaja en primera instancia en la migración segura. A parte de este tema que es central, dentro de la organización se cuenta con esquemas bien definidos de trabajo como lo son: la trata de personas, asistencia de gobiernos y asistencia a organizaciones civiles. Los funcionarios de la OIM tienen profesionales psicólogos, economistas, abogados, politólogos, etc. que brindan un acompañamiento e información para las personas que desean migrar o inmigrar a un país determinado.

En el caso de las personas víctimas de trata, la asistencia no se limita solo en adquirir el pasaje de retorno. Sino cerciorarse que el traslado de la persona sea seguro, con una ruta bien definida, y la información de la llegada al país para que una vez en destino se le pueda brindar asistencia psicológica si lo solicita la persona afectada o los profesionales que diagnosticaron.

Fuente: Agencia Jakueke