Una breve reflexión: ¿qué nos pasa che?

 

Rafael Luis Franco (frarafael@gmail.com)

Lo que es extraordinario de ver en la Argentina, en los distintos medios desde hace décadas, es lucirse a expertos de todo tipo, ya sea en economía, analistas políticos, filósofos, intelectuales, en general de muy buen nivel, etc., en horarios centrales, y a toda hora también, se los ve y escucha como debaten y analizan la situación del país, donde nos explican lo que está mal, lo que se debería corregir, sobre el tema económico principalmente, también sobre la seguridad, la cuestión laboral, la liberación de tal o cual condenado anticipadamente que luego violó y mató, el rol de la Justicia, el tema del día que diariamente que nos imponen, etc. etc. etc. Desde Neustadt, con su recordado Tiempo Nuevo, a la fecha hay infinidad de programas al respecto.

Ahora bien, lo que no se entiende, no queda claro y uno se pregunta es lo siguiente: ¿cómo con esta gente tan capaz, tan sesuda, que sabe todo de todo, cómo entonces se explica que el país esté como esté, con una inflación que viene de décadas, única en la región; con recurrentes megadevaluaciones; con los impuestos más altos del mundo; con un sistema educativo destrozado que lo pone en los niveles internacionales más bajos; con un índice de pobreza altísimo; con un sistema de salud pública decadente; con leyes que implementan hoy, que dicen una cosa, y mañana implementan otra contraria, no respetan las reglas del juego que ellos mismos imponen. Ahora mismo están violando su Constitución al ver de aprobar la legalización del aborto.

Bueno, esta política del que asume hace lo que se le da la gana y no respeta los acuerdos anteriores parece que ya viene desde 1810, o sea que no es nada nuevo; es así, entonces, que por más que el actual poder arregle los desaguisados anteriores, luego vendrá otro a hacer todo lo contrario, por tanto la idea de continuidad que prima en la sociedad es la no continuidad, está visto que la incoherencia es su coherencia.

Quizá con el fútbol y su selección, que acaba de ser eliminada del Mundial, podamos tener un ejemplo de lo que pasa con el comportamiento general: la selección argentina tiene muy buenos jugadores, lo que no tuvo en este Mundial fue un equipo y un proyecto, fue todo improvisación, y tener equipo significa tener un conjunto de personas que juega unida con un fin grupal, social, no individual, que tiene un proyecto y metas definidas; creo que este ejemplo del fútbol y su reciente fracaso solo viene a mostrar el reflejo de una sociedad que está profundamente dividida, que no sabe lo que quiere y que ya van para dos siglos de marchas y contramarchas, de odios y grietas. Y como por lo visto esto está en su naturaleza, forma parte de lo profundo de su cultura, a no desesperar, pues como dijo un tal o cual filósofo, porque si lo puedes arreglar no te preocupes, porque tiene arreglo; y si no tiene solución, tampoco te preocupes, pues no hay nada que hacerle