Si Cartes no va a la Montaña, la Montaña va a los micrófonos
Por Rafael Luis Franco
Está más que claro que para el nuevo mandatario, el primer dolor de cabeza o conflicto a subsanar no provino precisamente de las filas de su partido como todos vaticinaban, ni siquiera de la oposición, tampoco de los países vecinos, ni de la Unasur o Mercosur, Yacyretá o Itaipú; es más, los organizadores de la fiesta de la doble asunción, el Día de la Asunción de la Virgen y la asunción del mandatario, cuidaron hasta el último detalle el tema de la seguridad, porque parece que había una amenaza del Epp y otra de los educadores, de marchar en protesta, debe ser un caso único en la historia que hagan una manifestación el día que asume un mandatario, hay que darle por lo menos 24 horas.
A pesar de todas las precauciones igual saltó la perdiz, como siempre, donde menos se la espera. Y fue así que el primer problema presentado al mandatario, que parece va a ser complicado de arreglar, porque amenaza ser un culebrón novelero para deleite de las masas, provino de su gente, la más cercana: nada menos que de su ex, que esta mañana, apenas terminada la ceremonia, sorprendió a todos con su autoproclamación de “primera dama”.
Realmente estuvieron fuera de lugar los comentarios vertidos por la señora María Angélica Montaña, por lo que se sabe ex del actual presidente de Paraguay. Por la forma en que se entrometió en la conversación, que mantenía su hija con la periodista, da a entender que es una comedida, que quería figurar de alguna manera en esa hermosa fiesta que fue la asunción del nuevo mandatario y a la que se ve no estuvo invitada.
Si a uno no lo invitan a una reunión para qué ir, no tiene sentido, aunque se muera de ganas hay que aguantarse; porque no será bien recibido, es más ni siquiera será recibido y hará el ridículo; pero si va contra toda regla de urbanismo, protocolo y sentido común, es evidente que lo hace para molestar y buscar arruinarle la fiesta al que no lo invitó; una forma agresiva de encarar la situación y que promete guerra.
Pero por otro lado, también podemos pensar que esta señora cree que la presidencia de un país es un bien ganancial; y entonces ella automáticamente pasa, porque es evidente que el divorcio legal no se ha consumado, a ser la “primera dama”, lo afirmó en dos oportunidades.
Más allá de que la prensa va a utilizar el tema hasta exprimir la última gota; Cartes, con esta inesperada aparición en escena de su ex, que por lo visto y oído en su presentación de esta mañana da a entender que si se compone la situación y deja de ser ex está todo bien; pero si no, agarrate catalina.
El primer mandatario, inteligente como es, seguramente habrá advertido rápidamente la situación; ¿qué hará?, nadie lo sabe, pero sí podemos entender la disyuntiva al leer “entre líneas” esta frase: “Si Cartes no va a la Montaña, la Montaña va a los micrófonos”.