Observamos que el actual gobierno argentino tiene una agenda bien marcada e inamovible, en la negociación sobre Yacyretá con nuestro país.

Los argentinos quieren conservar, a cualquier precio, sus privilegios, es decir; seguir operando la usina a sus conveniencias, consumir discrecionalmente más del 90 % de la energía generada – obviamente sin pagar sus cuentas-, continuar disponiendo en forma unilateral y arbitraria del dinero recaudado por la venta de energía en su mercado, y también comenzar sí o sí la construcción de Aña Cuá y Corpus, como obras complementarias del proyecto Yacyretá.

Hemos dicho en su momento, y seguimos insistiendo: el actual gobierno argentino se aproxima inevitablemente a su fin. Entonces al Paraguay le sería más conveniente – y a lo mejor provechoso-, esperar y negociar con el nuevo gobierno que le sucederá el año que viene.

El Paraguay esta malgastando su tiempo con personeros de un gobierno que ya “huelen a llanura”. De lo poco que sabemos de las negociaciones que se están llevando adelante, hasta ahora ningún planteamiento del Paraguay ha sido tenido en cuenta por los argentinos.

El gobierno de Horacio Cartes debe tener en cuenta estos escenarios, y verá con certeza que con el actual gobierno argentino va ser muy difícil  que el Paraguay logre hechos convenientes o provechosos para el país, mucho menos recuperar la soberanía en la binacional.

Ing. Ramón Montanía Fernández – Director «Mundo de la Electricidad»