LA LECCIÓN DE LOS GUA’Í

Transparencia teete y no meras proclamas *

José María AcostaJosé María Acosta

 

Algunos todavía están buscando la fórmula para inventar la pólvora. Otros se llenan la boca de discursos y, a la hora de los hechos, naufragan bajo los ventarrones de la corruptela y la ineficiencia. Otros más siguen tomando nota de cursos y manuales de «buenas prácticas» y terminan licenciándose en capacitaciones inútiles o volviéndose expertos en talleres y seminarios rimbombantes, de mucho ruido, costosos honorarios y pocas nueces. Y los hay quienes se pasan diciendo «tenemos puertas abiertas para todos», en una actitud que esencialmente es candado para cualquier escrutinio y control del público sobre el manejo de la cosa pública. Valga la incoherencia.

 
Todos ellos debieran tomar el ejemplo de Villarrica, de sus autoridades municipales y de sus ciudadanos. No precisaron tanta alharaca ni autobombo en conferencias de prensa de preguntas restringidas. No recurrieron a publicidades seudo institucionales pagadas por las binacionales ni precisaron contratar costosos asesores de presidentes extranjeros. Hicieron apenas lo que debían hacer y convirtieron a la capital del Guairá en la capital de la transparencia y la participación ciudadana.

Ayer, lunes 21, se realizó en Villarrica la séptima versión de la Jornada de Transparencia y Participación Ciudadana, evento creado y ya convertido en una tradición en esta ciudad, cuyas autoridades municipales rinden cuenta anualmente de su gestión a la ciudadanía. Y la ciudadanía conoce y sabe que ése es un derecho suyo y no una simple «concesión graciosa» de sus gobernantes comunales.

La cultura de la transparencia se ha instalado en Villarrica. Los funcionarios comunales saben que se deben a la gente y, orgullosos, año tras año, presentan en una EXPO-TRANSPARENCIA sus logros, sus resultados, así como sus desafíos pendientes. Es un mérito compartido quizás con las autoridades comunales, pero todos saben que esta costumbre, convertida ya en una cultura favorable hacia la transparencia, no podrá ser desatendida ni obviada por ningún mandatario que ocupase la administración municipal en adelante.

No es un estado perfecto de anticorrupción, ni estamos ante una administración perfecta. Pero sí tenemos a una ciudad, una comunidad, unas autoridades y unos funcionarios que han comprendido que la transparencia y la eficiencia en la gestión son deberes permanentes que deben atenderse para bienestar de todos. A tal punto que ahora ya están embarcados en otro nuevo desafío: avanzar en la modernidad para mejorar la gestión.

Coincidente con la jornada de ayer, se ha anunciado el plan de modernización en la gestión que llevará a que Villarrica se convierta en la primera CIUDAD DIGITAL del Paraguay, con la implementación del gobierno electrónico. Ello apunta a tener un municipio más moderno, más inclusivo, más alcance del control de la gente, más abierto a la modernidad.
Mientras a nivel central todavía se están pagando consultorías con préstamos y donaciones monumentales para ver qué hacer al respecto, Villarrica ya está dando pasos adelantados, incluso por delante de la legislación nacional, para avanzar en la estructuración de una gestión gubernamental acorde al siglo XXI. Y todo ello, teniendo como eje conductor y preocupación fundamental la transparencia y la eficiencia en la gestión.

El sitio web municipal, www.villarrica.gov.py, es un ejemplo de cómo puede disponerse la información pública al alcance de la gente, sumado a iniciativas como estas audiencias públicas, carteles en la vía pública conteniendo los salarios de autoridades y funcionarios; teléfonos de acceso a la información; publicaciones de los gastos de royalties y listas de cheques pagados, entre otros.

Con todo esto, y comprendiendo que todavía hay mucho que avanzar, cómo no pensar que los guaireños tienen mucho que enseñarnos cuando se quieren hacer las cosas bien y no del revés. Valga la paradoja.

*publicado en ultimahora.com en el día de la fecha