La explotación en Sudamérica

 

Rafael Luis Franco (frarafael@gmail.com)

Recientemente he visto un video que han realizado inmigrantes hispanos en Canadá, donde muestran lo fácil que es conseguir trabajo en ese país. Aunque usted no lo crea en menos de cinco minutos lo consiguen con un llamado telefónico, puestos que solicitan vía internet o en algunas publicaciones que se encuentran gratuitamente en las tiendas; en la mayoría de los casos no se requiere experiencia previa, y son labores de empaque, limpieza, etc., nada calificado.

Ahora bien, el requisito básico es que estén debidamente documentados, los trabajos no son en “negro”, aunque también muestran en el video que esta modalidad la pueden conseguir hasta que regularicen su situación, mientras le pagan un poco menos.

Y no solo el trabajo, también con este le ofrecen vivienda y transporte, no en todos los trabajos y dependiendo de la zona. El sueldo ronda en los 15 dólares canadienses la hora, trabajan un mínimo de 40 horas semanales y seguramente podrán hacer extras, ya que la demanda de trabajo es muy alta.

Bien, si uno hace una simple cuenta nos da que un trabajador gana alrededor de 600 dólares canadienses semanales o 2.400 mensuales, que equivale en dólares norteamericanos unos 1800; sin contar la vivienda y el transporte que fácilmente se podría estimar en un 50% de lo que percibe el trabajador, que considero se puede sumar a su salario.

Pero esta exposición no pretende hacer promoción para irse a vivir a Canadá, aunque no sería mala idea, sobre todo para los jóvenes; este escrito apunta a mostrar la diferencia de nivel de ingresos que tenemos por esta zona. Si calculamos esos 1.800 más la vivienda y transporte, pongamos que ganan básicamente unos 2.500 dólares mensuales (sin contar horas extra), que traducido en pesos argentinos nos da a cotización actual ($ 57) unos 142.500 pesos, si es en guaraníes serían unos 16 millones, 1.8 millón en pesos chilenos, 91 mil pesos uruguayos y si es en Venezuela una cifra de 12 dígitos. Pero cuánto es el salario mínimo de estos países. Fíjense (en dólares): Argentina, 274; Paraguay, 365; Chile, 420; Uruguay, 410; y Venezuela, 2 dólares.

Como ven, los salarios por esta región están entre cinco y seis veces menos, ni hablar de Venezuela. Entonces encuentro que esta es la verdadera razón de la fluctuación de las monedas y su constante depreciación: mantener en la región sueldos de hambre o rayanos en la esclavitud, porque aquí encima no hay agregado de vivienda y transporte, esto hay que restarle al salario. Además, con las devaluaciones cíclicas consiguen licuar millonarias sumas al posicionarse alternativamente en una u otra moneda, local o dólar; aparte de las fabulosas ganancias que les reportan las altísimas tasas que pagan los bancos centrales, que así realizan un constante e ininterrumpido vaciamiento del erario; además de las deuda externa que se contrae con este sistema hace que sea imposible el crecimiento de una nación como debería ser. Con este sistema solo está garantizado el atraso y la concentración de la riqueza cada vez en menos manos.

Y esta explotación no afecta solo a los trabajadores y clases bajas, afecta también a las clases medias y pequeños empresarios, comerciantes en general; aparte de las leyes laborales junto a mafias sindicales de todo calibre que alimentan la desocupación; mafias que se llevan muy bien con cierta clase de empresario; junto a las regulaciones de todo calibre que son impuestas para generar monopolios o lobbys; regulaciones que distorsionan el mercado y no permiten la libre competencia.

Así, con estos bajísimos niveles de ingreso por supuesto que el dinero no le va a alcanzar a nadie; entonces no es que las cosas estén caras, es que la gente no gana lo que debería ganar, por tanto no hay ninguna posibilidad de desarrollo. También esta distorsión hace que las cosas valgan mucho más en dólares que lo que valen en países como el mencionado Canadá, o los EE.UU. mismo.

Y esta situación la han creado las grandes corporaciones que se fueron adueñando de los recursos naturales, de la distribución de los alimentos, de los servicios públicos, a la vez que sostienen y promueven a políticos inescrupulosos que hacen el juego económico que ellos quieren.

Pero esto no sería posible si estas mismas corporaciones no controlaran los grandes medios, directa e indirectamente, en donde aparecen todos los días pseudoeconomistas con un libreto o guión del que no pueden escapar, lo mismo los panelistas que se ocupan de la política, o periodistas muy bien pagados que sirven a este sistema y nunca muestran la realidad de otros mundos, manteniendo a su público idiotizado con programas estúpidos; que es lo que le interesa a estas corporaciones; siendo muy pocos los medios donde uno puede escuchar otra campana; campana que hoy día suena más en las redes y gracias a youtubers anónimos que muestran realidades que los grandes medios ocultan.

Ya lo he dicho en otra oportunidad, estamos como el antiguo mensú o tarefero, al que la empresa le pagaba con vales, teniendo este que recurrir al almacén de dicha empresa donde las cosas valían mucho más, pero era el único lugar donde le aceptaban ese vale; mientras que los dueños se llevaban el dinero de verdad; es la misma situación, pero ahora lo hacen a nivel global y el vale es la moneda local.

Este sitio es uno de los tantos videos que hay sobre inmigrantes en Canadá, aunque no es el que vi y me impulsó a escribir esta nota: https://www.youtube.com/watch?v=T860ca9EJyA

(Ver los requisitos para viajar y trabajar en Canadá, ingresando a Google y escribir: inmigrantes en Canadá)