Ayer, el Gobierno paraguayo ha entregado los restos mortales de las víctimas de la dictadura militar (1954-1989) a sus familiares. Son las primeras víctimas desaparecidas del Operativo Cóndor durante el gobierno del general Alfredo Stroessner que fueron identificadas mediante estudios genéticos y antropológicos forenses del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF).

Así, los restos de Cástulo Vera Báez, quien habría fallecido en marzo de 1977, según la inscripción de su fallecimiento, fueron entregados a Lorenza Vera de Cantero. También los restos de Miguel Ángel Soler, fallecido en diciembre de 1975, fueron entregados a Jorge Miguel Soler.

Ida Beatriz García recibió los restos de su madre, Raffaella Filipazzi (italiana), quien fuera secuestrada en 1977 y muerta en Montevideo en Marzo de 1978en Montevideo junto a José Agustín Potenza (argentino), cuya hija, Silvia, también recibió los restos de su padre. Ambos permanecieron desaparecidos 39 años y fueron hallados en fosas de un predio de la Policía Nacional e identificados el año pasado.

La entrega se formalizó en un acto oficiado por el Ministerio de Justicia de Paraguay, cuya viceministra, Cecilia Pérez Rivas, destacó el trabajo articulado con el Estado argentino y la Justicia Federal para la búsqueda e identificación de las víctimas de las dictaduras sudamericanas

Del acto participó el embajador argentino en Paraguay, Eduardo Zuain, quien remarcó la profundización del vínculo bilateral en «busca de Justicia y creación de conciencia y memoria”

Por su parte, el Dr. Rogelio Goiburú, Director de Memoria Histórica y Reparación del Ministerio del Ministerio de Justicia del Paraguay, expresó que “es un trabajo que empezamos hace tiempo y ahora hay que insistir en que la justicia averigüe que pasó”.

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