En esa época ejercía el poder el Partido Liberal y la Presidencia de la República José P. Guggiari, quien sufrió el peor de los avatares: la manifestación de de estudiantes y civiles del 23 de octubre de 1931

La manifestación fue organizada por los Centros de Estudiantes del Colegio Nacional de la Capital y dela Escuela Normal, con apoyo de algunos políticos y dirigentes obreros  para expresar su malestar y reclamar al gobierno la defensa del Chaco paraguayo ante las incursiones del ejército boliviano en dicho territorio. Los manifestantes, en sucesivas movilizaciones llegaron ante el Palacio de Gobierno e intentaron forzar la guardia, cuando una ráfaga de ametralladora segó la vida de muchos de ellos.

A raíz de ello, el propio José Patricio Guggiari solicitó su juzgamiento al Congreso Nacional siendo absuelto de culpa y pena, reasumiendo así la primera magistratura de gobierno, constituyéndose en el primer Presidente de la historia política del Paraguay en ser sometido a un juicio político

Aún hoy cuesta desentrañar las causas y los reales motivos de dicho acontecimiento, pues aún subsisten versiones interesadas en narrar el hecho de acuerdo con la visión del sector partidario al que pertenecen.

Así, Enrique Volta Gaona en su obra: “23 de octubre, Caireles de Sangre en el alma dela Patria Paraguaya”, como integrante del Movimiento Nacionalista dela Asociación Nacional Republicana (Partido Colorado), considera que esos acontecimientos merece su anatema y repudio eterno.

Por su parte Efraim Cardozo, que en ese momento era Secretario de José P. Guggiari; en su libro “23 de octubre, una página de historia contemporánea del Paraguay”, se pregunta: ¿fue realmente una manifestación estudiantil y pacífica? ¿Pedían realmente la defensa del Chaco?

¿Y qué dice Juan Stefanich, ideólogo del que sería el Partido Revolucionario Febrerista y ex ministro de Relaciones Exteriores del Presidente Rafael Franco en su obra “El 23 de octubre de1931”?  Que fue “la primera batalla por la defensa del Chaco y Primer grito de la Revolución de Febrero de1936”, y responsabiliza al oficialismo liberal de lo que él denomina “masacre”.