Larissa Riquelme abandonó Showmatch

En la gala de sentencia y eliminación de “Bailando por un sueño 2011”, Silvina Escudero y Sofía Pachano fueron las últimas en bailar el adagio de novela. Fue una noche de mucha tensión, por las instancias finales del certamen.

El conductor Marcelo Tinelli les preguntó si entre ellas se peleaban y las participantes aclararon que no. Por su parte Sofía, afirmó que sí tiene algunas diferencias con su padre, Aníbal.

El padre de la bailarina contó que estaba un poco celoso. «La llamo para almorzar un domingo  y nunca tiene tiempo porque está de novia», dijo Pachano. «Es que no para de hablar y te quema el cerebro»,  se justificó Sofía.

Por otra parte, Silvina y Moria se reconciliaron. La bailarina le pidió perdón a la diva y ambas se amigaron, dejando de lado sus diferencias y la idea de ir a resolverlos a la Justicia.

El jurado le puso la siguiente puntuación Carmen Barbieri (7); Flavio Mendoza (6); Moria Casán (6); Aníbal Pachano (voto secreto); y Marcelo Polino (4). En total, obtuvieron 23 puntos.

Tinelli dio a conocer los votos secretos de Pachano y las parejas sentencias para bailar en el duelo fueron: Larissa Riquelme, Tito Speranza, Peter Alfonso, Silvina Escudero, Coki Ramírez.

Luego de las performances del ritmo adagio de novela, en primer lugar, el jurado decidió salvar a Silvina Escudero y Sofía Pachano; segundo fue elegido Peter Alfonso; y el último seleccionado fue Tito Speranza.

De esta manera, fueron al teléfono Larissa Riquelme y Coki Ramírez, quienes están enfrentadas por distintas razones. La paraguaya acusó a la cantante de haberla discriminado, aunque ella lo negó. Y luego, las fanáticas de la cordobesa agredieron a Larissa.  

Para la votación hubo récord de llamadas, con 621.706 votos entre llamados telefónicos y mensajes de texto. Por decisión de la gente, Coki Ramírez ganó con votación mayoritario (55.63%) y Larissa debió abandonar el certamen (44.37%).

Antes de irse del programa, Riquelme comentó: «Me voy feliz y contenta. Tenés una gran producción. Esto no es una derrota es una victoria. Vamos a seguir para la escuela de Roque Pérez. Quiero la revancha el año que viene».

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