¿Qué rostro tiene la pobreza en Paraguay?
Pablo Cesio/Aleteia Paraguay (*)
Según un informe de la Universidad Católica de Asunción, más de 600.000 niños paraguayos viven en situación de pobreza
Basta con caminar un instante por algunas zonas de la capital de Paraguay, Asunción, para conocer el verdadero rostro de la pobreza. Se los ve caminando por las calles, pidiendo una moneda en alguna esquina o simplemente echados en un rincón durmiendo, como Diego (nombre ficticio para preservar su identidad) que reposa descalzo y extendido a los ojos de los transeúntes
Pero también hay otros que se ubican en los semáforos limpiando vidrios, vendiendo diversas cosas o subiendo a los autobuses con algún instrumento improvisado musical para “descongelar corazones” y que alguien les pueda donar una colaboración. Ahí están, por todos lados. Son tan solo niños, y representan el verdadero rostro de la pobreza en Paraguay
Así lo confirma un reciente estudio denominado ”Infantilizacion de la pobreza” del Centro de Investigación Aplicada de la Facultad de Ciencias Contables, Administrativas y Económicas del Campus de Asunción (Universidad Católica), que devela, entre otras cosas, que más de 600.000 niños (40%) viven en situación de pobreza a consecuencia de la subocupación laboral.
Es que la situación de desocupación y subocupación laboral termina impactando en las familias, que cuentan con bajos ingresos, algo que genera dificultad a la hora de mantener el bienestar de los menores, reproduce la propia Universidad Católica en su informe
También se desprende que “de 1.500.000 niños, menores de 10 años de edad, el 40% vive con escasez moderada y el 9% en indigencia con un ingreso per cápita familiar” muy bajo. A esto se suma “niveles mínimos de nutrición, educación, recreación, salud y vivienda”
Subocupación laboral, trabajo informal – Al momento de encontrar alguna explicación a esta situación, el encargado de liderar la investigación, el economista Emilio Ortiz, destacó entre los principales factores los problemas de subocupación, empleos de baja calidad conocidos como trabajos informales. Eso que se puede ver a simple vista con tan solo recorrer un poco las calles de Asunción.
“En sociedades como la nuestra, con problemas de desocupación y subocupación laboral, el futuro de la infancia esté severamente restringido, por lo tanto la desigualdad se reproduce a lo largo de las generaciones”, sostuvo
La situación de pobreza de los niños se da en el contexto de una sociedad y una economía muy desigual que no proporciona igualdad de oportunidades para todos”, agregó el investigador.
¿Alguna solución? – Entre las principales propuestas que pone a consideración este centro académico se encuentra la generación de crecimiento económico y fuentes de empleo para que las familias puedan trabajar y así lo niños puedan cortar con el círculo vicioso que los obliga a salir a buscar sustento
“Esos son grandes desafíos porque, aparte de satisfacer nuestro mercado que es chico, tenemos que exportar y al exportar tenemos que competir con economías y empresas que son muy productivas”, expresó el investigador.
(*) es.aleteia.org