Navidad del Paraguay

Paraguay es uno de los países que mantienen su tradición católica, preparando un pesebre que representa al establo de  Belén donde nació el Niño Jesús. Tradicionalmente, el armado se hace  el 8 de diciembre y se desmonta el 6 de enero del año siguiente, después de la llegada de los Reyes Magos.

pesebre paraguaLa Navidad del Paraguay, huele a flor de coco (mbokajá poty), que son unas espigas aromáticas de color amarillo-dorado, envueltas en una vaina afelpada que, ya desde épocas inmemoriales, se adoptó como aditamento característico para adornar los pesebres paraguayos.

Cada diciembre, las calles de Asunción y los pueblos del interior se llenan de vendedores ambulantes que la ofrecen. Además de la flor de coco, el pesebre paraguayo tiene otros rasgos singularísimos: también se la ornamenta con frutas de estación, como sandía, melones, piñas, bananas y uvas, que aportan sus inigualables fragancias. Asimismo, para hacerlo más “autóctono” se le anexa dorados chipás, el manjar típico más codiciado de la gastronomía guaraní, que posteriormente se convida a los que vistan la casa para el pesebre, a los que incluso se les sirve un vaso de “clericó” por lo que los agasajados agradecen a los dueños de casa, diciéndoles: “que lindo está su pesebre”. El pesebre que condensa la armonía del hombre con su medio ambiente y que está presente, recreando el nacimiento del Niño Luz.

Esta costumbre religiosa y familiar, también se conserva en los hogares de los paraguayos que residen en el exterior, haciendo honor al legado que les han transmitido sus ancestros y progenitores.

CANCIÓN DE NAVIDAD

Dos trocitos de madera

 Letra y música: Maneco Galeano

 Dos trocitos de madera

ya techaron el establo,

en el cielo hay una estrella

que guía a los reyes magos.
El niño, José y María
moldeados en el barro
dan la imagen navideña
itá jegua color rosado.

Con chipa se hizo la cena
y un pedazo de mbejú,
estamos en Nochebuena,
la noche del mborayhu.

De regalo sandía y chipa,
naranjitas y paková,
peguerúke lo mitá

Ñandejara´í pe guarã.
Qué lindo está su pesebre,
mirána un poco el yvu,
y en sus orillas cantando
su tristeza un kururú.

El pesebre, los amigos
y el cariño hacia Jesús,
se enlazaron con la caña
y el famoso arro kesu.

En la tierra el pasto verde
y en la mente una ilusión,
opaichagua oí la gente
ovy´a che korasõ.

De regalo sandía y chipa,
naranjitas y paková,
peguerúke lo mitá

Ñandejara´í pe guarã.