El 24 de febrero se celebra el Día de la Mujer Paraguaya, clave en la historia del país. Heroica, valiente, sencilla y trabajadora, fue y es el factor más importante de la existencia de nuestro país

El sufrimiento parece haber marcado a la mujer paraguaya desde la colonización. Utilizada como “moneda de cambio” por los nativos hace más de 450 años, también recibió los embates de las secuelas de la Guerra de la Triple Alianza (1864-1870).

El esquema social se vio alterado por esta guerra. Las madres tenían hijos de diferentes padres, más que nada por la necesidad de volver a repoblar el Paraguay. Esto acarreó más secuelas para las ya sufridas mujeres de nuestro país.

Este hecho trascendental les vale, cada vez con más frecuencia, los halagos del papa Francisco, el argentino Jorge Bergoglio, quien antes de ser Sumo Pontífice ya destacaba el rol de las mujeres paraguayas. Y ya como Papa pidió que se les dé el Premio Nobel de la Paz por su labor.
¿POR QUÉ EL 24 DE FEBRERO?
El Día de la Mujer Paraguaya se estableció el 24 de febrero en base “a la Asamblea de Mujeres ocurrida el 24 de febrero de 1867 –‘Primera Asamblea de Mujeres Americanas’– en la que mujeres de la capital y el interior del país donaron lo que tenían de valor para ayudar a la causa bélica”, en plena Guerra de Triple Alianza. (*)

La historiadora y maestra Idalia Flores de Zarza y la Dra. Carmen Casco de Lara Castro promovieron en 1974 que el 24 de febrero sea recordado como el Día de la Mujer Paraguaya. En diciembre de ese mismo año, la ley fue proclamada por ambas cámaras del Congreso y la promulgación no se hizo esperar.

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 (*) N.  de R.  Robert Bontine Cunninghame Graham, político escocés, escritor, periodista escribió en 1933 un libro titulado “Retrato de un Dictador”(editado en Bs. As. en 1943) en el que afirma que dicha donación era forzada y no voluntaria.