“Aní oikó tesarai” – Casa Argentina de Asunción y el “Fondo Patriótico Malvinas”
El conflicto del Atlántico Sur (Guerra de Malvinas) se desarrolló entre el 2 de abril y el 14 de junio de 1982, en el marco del gobierno de facto instaurado el 24 de marzo de 1976
La ocupación de las Malvinas se anunció en un clima de deslegitimación y debilidad de la tercera Junta Militar -instalada el 22 de diciembre de 1981- conformada por el general Leopoldo F. Galtieri, el almirante Jorge Isaac Anaya y el brigadier general Basilio Lami Dozo.
El 15 de abril de 1982, el gobierno militar crea el Fondo Patriótico Malvinas Argentinas, una cuenta bancaria administrada por la Secretaría de Hacienda destinada a recaudar fondos para financiar los gastos relacionados con la recuperación de las Islas Malvinas, las Georgias del Sur y las Sandwich del Sur. Como resultado, se obtuvo la mayor colecta de la historia de Argentina: 54 millones de dólares en casi tres meses de donaciones en dinero, joyas, ropa, alimentos y otros elementos.
El destino de esas donaciones para el Fondo Patriótico sigue siendo motivo de discusión hasta hoy.
EL CLIMA DE ENTONCES – ‘Pensar la guerra que vivió el país durante 74 días no es tarea fácil. Implica cruzar sentimientos respecto de una historia reciente llena de interrogantes, contradicciones e incomprensión. El apoyo masivo a la Junta Militar en la Plaza de Mayo el 2 de abril, es un claro ejemplo de esta dificultad. ¿Cómo explicar las imágenes que muestran “al pueblo argentino” reunido para alentar una guerra conducida por una dictadura, que lo había reprimido salvajemente sólo tres días antes?, ¿cómo entender a los argentinos que participaron en los diferentes programas televisivos para donar fondos para esta guerra, motivados por una orgía nacionalista?, ¿cómo dar cuenta del éxito de campañas y convocatorias de apoyo que generaban los medios de comunicación, en el contexto de un régimen que estaba dando sus últimos estertores?’ ‘
Multitud de gente frente a la Casa Rosada entonando canciones futboleras: “Vamos, vamos Argentina, vamos, vamos a ganar”. Galtieri sale al balcón con los brazos en alto y saluda al pueblo reunido. “Ay ay ay ay, que risa que me da, si quieren las Malvinas que las vengan a buscar”. Las banderas celestes y blancas, “el que no salta es un inglés”. Carteles pintados a mano sobre tela blanca que dicen “Malvinas. 150 años pirateadas por fin recuperada” (elfurgon.com.ar) fue el escenario en la ciudad de Bs. As.’
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1982 – COLECTA PARA EL “FONDO PATRIÓTICO MALVINAS” EN ASUNCIÓN
No existen registros escritos ni fotográficos – al menos nosotros no los encontramos, pese a nuestra exhaustiva investigación- sobre como se organizó la colecta para tal fin en Asunción. Y aunque pensamos que la misma tuvo anuencia del gobierno argentino, no podemos afirmarlo con contundencia.
“Ha aní oikó tesarai ko tembiapóre” (para que no quede en olvido este hecho) recurrimos a nuestra memoria porque en aquella época residíamos en Asunción.
La ciudad estaba consternada por la noticia del enfrentamiento bélico que, como ocurre siempre, dividió a la sociedad en dos bandos, dónde la mayoría se inclinaba por Inglaterra.
El único negocio que tenía izada la bandera argentina frente a su local, en lo alto de su letrero identificatorio, se llamaba “Supertodo”, ubicado en la Av. Gral. Santos c/ la Av. José Félix Bogado que era el camino obligatorio hacia Itá Enramada, puerto donde se tomaba la balsa para cruzar al Puerto Pilcomayo, localidad argentina cercana a Clorinda.
El tema era que, por ese motivo, el negocio en cuestión recibía frecuentes “tomatazos” que lanzaban algunas personas desde camionetas que transitaban por esa populosa avenida de doble vía recién asfaltada.
(En aquel tiempo, y hasta ahora los asuncenos siguen, seguimos, siendo pasionales)
El asunto es que para recaudar la ayuda solidaria para dar una mano a los combatientes argentinos en Malvinas, se eligió como puesto de comando a la casona-mansión de la “Casa Argentina,” que se alza en la Av. Mariscal López esquina Brasil, por cuyo frente pasaba una línea de tranvía.
Lamentablemente no hemos logrado información alguna en los medios de prensa del Paraguay y Argentina, ni de la Casa Argentina en Asunción ni en la Embajada Argentina, sobre lo recaudado esa vez ni su destino posterior, por lo cual este testimonio quedará como tal hasta que aparezca, aunque sea por milagro, algún dato que lo corrobore.
Hasta que ello ocurra, este medio siempre rendirá homenaje en su día -2 de abril- a los excombatientes, veteranos y los caídos en esa contienda desigual.